¿Por qué se utiliza el ánodo de dióxido de plomo en el tratamiento de efluentes?

19 de mayo de 2022

¿Por qué se utiliza el ánodo de dióxido de plomo en el tratamiento de efluentes?

Con el aumento de la regulación legislativa, los efluentes deben tratarse completamente antes de descargarlos en ríos, lagos o el mar, se han realizado amplios estudios sobre la mineralización electrolítica de compuestos orgánicos con un enfoque particular en compuestos que son tóxicos o resistentes a los tratamientos biológicos. Se cree ampliamente que la mineralización completa ocurre por mecanismos dominados por la transferencia de oxígeno y los radicales OH adsorbidos o libres, en lugar de la transferencia directa de electrones de los compuestos orgánicos al ánodo.

Esto requiere ánodos que sean estables a potenciales muy positivos; El dióxido de plomo y el diamante dopado con B han demostrado ser los materiales más adecuados. En general, el diamante dopado B proporciona la tasa más alta de mineralización, pero dichos ánodos son caros y persisten dudas sobre su estabilidad a largo plazo. Esto presenta oportunidades para el dióxido de plomo. Particularmente en el tratamiento de aguas y efluentes, se debe demostrar claramente la ausencia de contaminación por Pb(II) del medio.

Se han realizado muchos estudios sobre los mecanismos de degradación de los compuestos orgánicos en los ánodos de dióxido de plomo mediante la identificación electroquímica, espectroscópica y de productos intermedios. La evidencia más convincente de un papel para los radicales OH proviene del uso de agentes atrapadores de espín, pero muchos de los pasos en las complejas secuencias de reacción siguen siendo especulaciones. También hay pruebas fehacientes de que el dopaje de la capa de PbO2 electrodepositada con elementos como Bi(III), Fe(III) y F acelera la oxidación, conduce a una mineralización más completa y/o mejora la estabilidad del recubrimiento.