¿El metal de titanio se convertirá en corrosión?
El titanio es un metal muy reactivo: cuando se expone a un entorno aireado, se forma una fina película de dióxido de titanio, de aproximadamente 1,5-10 nm de grosor. Este óxido suele ser compacto, adherente al sustrato y químicamente estable en una variedad de entornos, y es responsable de la excelente resistencia a la corrosión del titanio.
A pesar de ello, el titanio sufre corrosión en ambientes agresivos. El titanio puede sufrir tanto una corrosión uniforme como una corrosión localizada: grietas y picaduras, etc.